Realidades y mentiras sobre el cinturón de seguridad

Realidades y mentiras sobre el cinturón de seguridad

Mucha gente piensa que, al producirse un choque, quedarse atrapado por el cinturón de seguridad es peor que salir despedido del vehículo. Esto es totalmente falso, ya que salir despedido del vehículo es 25 veces más peligroso. Con cinturón, las posibilidades de permanecer consciente son mayores..

Otros piensan que podrían llegar a quedar atrapados si el vehículo se incendió o se quedó sumergido en el agua, lo que también es totalmente falso. El cinturón de seguridad evita los golpes que producen inconsciencia. Además, esta clase de hechos ocurren en el 0,16 y 0,3% respectivamente del total de accidentes.

Hay quienes sostienen que no es necesario utilizar el cinturón de seguridad en asientos traseros. Estos es totalmente aberrante: un ocupante del asiento trasero sin cinturón, tiene muchas posibilidades de salir despedido del vehículo y agravar la situación de los pasajeros delanteros.

Otro error, lo obtienen quienes piensan que si hacen viajes cortos, no necesitan utilizar el cinturón de seguridad. Lo cierto es que, el accidente siempre es inesperado sin importar la cantidad de kilómetros recorridos.

El cinturón de seguridad es tan necesario en la ruta como en la ciudad, ya que en velocidades reducidas, el cinturón puede marcar la diferencia entre quedar herido o completamente ileso.

Hay que tener en cuenta además, que en condiciones normales y con el cinturón colocado, se puede tocar el tablero con la cabeza, pero en un accidente, evita que los pasajeros del auto salgan despedidos. El cinturón de seguridad permite la movilidad mientras no ocurren incidentes.

Y por supuesto, no hay que dejar de mencionar que, aunque el vehículo posea airbag, es necesario utilizar el cinturón, ya que el airbag no lo sustituye, sino que tienen fines diferentes.

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